Nos convencemos a nosotros mismos de que la vida será mejor después de casarnos, después de tener un hijo, entonces después tener otro. Entonces nos sentimos frustrados de que los hijos no son lo suficientemente grandes y que seremos más felices cuando lo sean.
Después de eso nos frustramos porque son adolescentes y difíciles de tratar. Ciertamente seremos más felices cuando salgan de esa etapa.
Nos decimos que nuestra vida estará completa cuando a nuestro esposo a esposa le vaya mejor, cuando tengamos un mejor coche o una mejor casa, o cuando nos podamos ir de vacaciones, cuando estemos retirados...
La verdad es que no hay mejor momento para ser felices que ahora. Si no es ahora…cuándo? Tu vida siempre estará llena de retos. Es mejor admitirlo y decidir ser felices de todas formas.
Alfred D. Souza dijo:
"Por largo tiempo parecía que para mi la vida estaba apunto de comenzar, la vida de verdad… pero siempre había un obstáculo en el camino, algo que resolver primero…algún asunto que terminar…el tiempo por pasar…deudas que pagar…entonces la vida comenzaría. Hasta que me dí cuenta que estos obstáculos eran mi vida".
Esta perspectiva me ha ayudado aver que no hay camino para la felicidad, sino que la felicidad es el camino.
Así que atesora cada momento que tienes, y atesóralo más cuando lo compartes con tus seres queridos, que son lo suficientemente especiales para compartir tu tiempo, tu vida, y recuerda que el tiempo no espera a nadie…
Así que deja de esperar…
A que termines la escuela…
Hasta que vuelvas a la escuela…
Hasta que hagas una dieta…
Hasta que te cases…
Hasta que tengas hijos…
Hasta que tus hijos se vayan de la casa…
Hasta que te divorcies…
Hasta el viernes en la noche…
Hasta el domingo en la mañana…
Hasta que sea quincena o fin de mes…
Hasta la primavera…hasta el invierno…el verano u otoño;
Hasta el último día de nuestra vida para decir NO HAY MEJOR MOMENTO QUE ESTE para ser feliz, porque la felicidad es el trayecto no el destino.
–Anónimo–